La Municipalidad de Curicó, junto a Carabineros de Chile, realizaron intensas fiscalizaciones durante el fin de semana respecto al uso de hilo “curado” en el sector de Don Sebastián de Rauquén, lugar donde las últimas semanas se juntan grandes grupos de personas a elevar volantines.
El hilo “curado” atraviesa un proceso con vidrio molido que lo deja más resistente, pero al mismo tiempo mucho más peligroso para la sociedad. Así lo detalló el alcalde de Curicó, Javier Muñoz, quien afirmó que ya han habido varios accidentes, algunos llegando a consecuencias casi fatales.
“Nosotros vamos a seguir en este trabajo colaborativo ahí y en otros sectores de la comuna, pero lo importante es que la ciudadanía entienda que el hilo curado no está permitido por ley. Nosotros estamos desarrollando junto con Carabineros esta campaña, pero la labor de fiscalización por tratarse de un delito le corresponde a Carabineros y nosotros vamos a colaborar en todo lo que sea posible para que eso se siga desarrollando. Se debe denunciar al 133”, detalló la máxima autoridad de la comuna.
Respecto a las fiscalizaciones, el mayor de Carabineros, Juan Díaz, explicó que “personal de Carabineros en conjunto con personal de la municipalidad, a través de una reunión que se realizó con vecinos del sector de Don Sebastián de Rauquén, durante el fin de semana se realizó un servicio de control y campañas preventivas respecto al uso del hilo curado al momento de elevar volantines, lo anterior con la finalidad de prevenir accidentes que habían ocurrido días anteriores manifestado a través de redes sociales, porque oficialmente no había ninguna denuncia. Afortunadamente no se generaron incidentes este fin de semana, lo que permitió también garantizar la seguridad de quienes residen en el sector”.
La Ley 20.700 sanciona como delito la venta del hilo curado con penas de presidio menor en su grado mínimo, de 61 a 540 días, y multas de 100 a 500 UTM. Mientras que el uso se castiga con multas de 2 a 50 UTM.