La Brigada Antinarcóticos de la PDI detuvo a Octavio Aravena Venega y Rodrigo Aravena Cabrera, padre e hijo respectivamente, por una investigación que llevaba Fiscalía en su contra por presunto cultivo de drogas, situación que se comprobó instantes después al allanar distintas dependencias de su propiedad.
Los detenidos, a quienes se les incautó 2 millones de pesos en efectivo, además de armas de diverso calibre y munición, cultivaban las plantas de marihuana en bodegas que habían sido transformadas en invernaderos especializados, lo que se conoce como cultivo “indoor”, y que permite entre otras cosas a las plantas aguantar bajas temperaturas.
Padre e hijo fueron formalizados por el tráfico de 12 kilos de marihuana, por lo que se les decretó la medida cautelar de prisión preventiva durante los 5 meses que el Juzgado de Garantía de Lautaro dictó para la investigación.
El tribunal solicitó además la retención de los fondos bancarios de los dos imputados durante este tiempo.
Los otros 18 kilos restantes de marihuana preliminarmente corresponden a otro sujeto, quien es intensamente buscado por la PDI.