Se encendieron las primeras velas del próximo «Mausoleo Bebé Estrella»
Romina Díaz es una de las muchas madres que han perdido a sus bebés, motivo por el cual fue una de las líderes en la actividad que presentó el nuevo proyecto del Cementerio Municipal de Curicó, denominado “Mausoleo Bebé Estrella”, que consiste en un espacio especial para todos lactantes que no pudieron seguir por diversos motivos con vida o incluso que no soportaron los nueve meses dentro del vientre.
Romina actualmente tiene a su hijo en su casa gracias a diversas gestiones, pero no es la misma suerte con la que han contado muchas madres. “Durante muchos años el 10 de abril me generó angustia y dolor, es un camino largo, desgarrador, que durante mucho tiempo personas lo vivieron en silencio. Agradezco a las autoridades por darnos esta oportunidad de los “bebés estrellas”, ya que muchas mamás no tienen donde dejar a sus hijos o incluso no pudieron recuperar los cuerpos. Hoy tiene que ser un día de alegría y esperanza” aseguró.
Esta iniciativa que es la primera de la Región del Maule, fue iniciada por la Municipalidad de Curicó, en conjunto con el Cementerio Municipal, el grupo “maternidad lila”, entre otros y debería estar a disposición de la comunidad entre los meses de junio y julio, con una capacidad para aproximadamente 70 sepulturas, que deberían alcanzar para un mínimo de 20 años según las autoridades y que deberían verse como la siguiente imagen.
Roberto García, consejero regional y director del Cementerio Municipal fue el primero en dar unas palabras y afirmó que “con el correr del tiempo y con la empatía que esto merece, quisimos mejorar los nichos que habían acá. Este es el inicio de una de las obras de arquitectura más hermosas que vamos a tener en el cementerio. Lo que iniciamos hoy nos llena de una alegría tremenda, tener este espacio y este lugar con muros, que tendrán una estrella con su respectivo nombre, el que cada una de ustedes querrán recordar por siempre.
El “Mausoleo Bebé Estrella” será un servicio gratuito y construido por los mismos funcionarios del cementerio, en una inversión que bordea los $7 millones de pesos con recursos propios del recinto.